El verano trae consigo infinitas sensaciones: Luz, colores vivos, frescura, desenfado… y en todas las casas se pueden añadir toques decorativos acordes a la época en la que nos encontramos para que nuestro hogar se sienta vivo.
Es por ello, que en el artículo de hoy te traigo algunas tendencias de decoración para este verano que además te inspirarán enormemente si tienes que hacer regalos para la casa durante estos calurosos meses ¡Vamos allá!
El blanco nunca falla
El blanco es un must que dará frescura a tu casa y también «expandirá» los espacios pequeños.
Aquí tienes un ejemplo claro de sensación limpia y despejada que calma la vista, precisamente lo que buscamos en las vacaciones de verano: un poco de paz y tranquilidad. Se trata de un conjunto de lámpara de sobremesa de estilo vanguardista y mueble minimalista blanco (todo de Kivole).
Mimbre, junco y bambú, lo natural está en auge
Otra tendencia que vuelve cada verano (o quizá nunca se fue) es la decoración con muebles y detalles creados con mimbre, juncos y bambú.
También en kivole.com podemos encontrar algunas piezas elegantes y prácticas fabricadas con materiales naturales, como esta preciosa lámpara de mimbre.
Estampados veraniegos ¡una explosión de color!
Algo que me gusta especialmente en verano y que ahora está muy de moda son los estampados con motivos florales, con cebras, con elefantes, con tigres, con delfines, con flamencos, con palmeras… existen mil y un ejemplos de detalles que puedes utilizar en tu casa para introducir esta tendencia, que no siempre es fácil de combinar.
Mi consejo es que no te excedas mezclando muchos estampados diferentes.
Intenta seguir una línea coherente en cuanto a la paleta de color elegida y no te salgas mucho de esa idea.
Otro tip que te doy es que combines estampados impactantes con colores lisos y neutros en la misma línea del estampado. Por ejemplo, si tu estampado es como esta funda de cojín de leopardos en tonos amarillos con plantas tropicales verdes (de Kivole), los muebles a su alrededor deberían también tener tonos verdes, blancos, amarillos u ocres.
Como te puedes imaginar, añadir una funda al sofá con otro estampado o introducir colores azules, violetas o rosas, por poner algunos ejemplos, sería desastroso a nivel visual. Opta siempre por la sencillez: Menos es más.
El bosque dentro de casa
Una curiosa tendencia decorativa veraniega que cada vez tiene más adeptos es la integración de muebles que parezcan elementos propios de un bosque.
De hecho, si buscas regalos para la casa para algún amigo o familiar, este tipo de detalles decorativos serán muy bien acogidos por su calidez y, sobre todo, por su gran originalidad. No fallarás con tu regalo.
Aquí te muestro dos ejemplos perfectos (ambos de Kivole) que forman parte de esta tendencia.
Por un lado, una lámpara que simula ser un nido con un pajarito.
Y por otro lado, este peculiar perchero que recuerda a un árbol con ramas.
Te habrás fijado en que muchos de los muebles que se llevan en la temporada estival se nutren de maderas en tonos claros. Y es que el verano suele ir muy de la mano de maderas de pino, de chopo, de abedul o de haya, entre otras.
Tampoco tengas miedo en lanzarte a utilizar maderas de colores más oscuros como el roble, por ejemplo, pero intenta compensar la estancia con paredes blancas u otros elementos en tonos claros para que los muebles en colores oscuros no se «coman» todo el espacio.
Recuerda siempre que la vista nos engaña, que el blanco agranda y el negro empequeñece.
¿Te apuntas a las tendencias de decoración de este verano? ¡Déjame tus impresiones en comentarios!
El blanco nunca falla, totalmente de acuerdo. Muy buenas las propuestas.
¡Muchas gracias, Vero!